viernes, 16 de marzo de 2018





LA  LOCURA DEL PAN

La historia del PAN en la crónica escrita de la alimentación de los pueblos, corre paralela con el uso de los cereales. El pan junto al vino y al aceite, fueron posiblemente los primeros alimentos procesados en la historia de la humanidad.

Los cereales, por su textura, no pueden ser digeridos por el aparato digestivo humano. Por todo ello el hombre tuvo que recurrir a “modificarlos”, bien moliéndolos, cociéndolos y cocinándolos, para de esta forma empezar a consumirlos como alimento. Hay indicios históricos claros de que el hombre empezó a “cocinar” los cereales antes de que apareciera en nuestras dietas de supervivencia el PAN.

EL PAN EN LA BIBLIA

La primera vez que se menciona la palabra PAN en la Biblia, fue en el mismo Huerto del Edén, cuando Dios maldijo al hombre por haberle desobedecido al  comer del fruto del árbol del bien y del mal. Esta vez el Señor había sentenciado al hombre a trabajar para ganar el PAN DE CADA DIA, con el sudor de su frente. Esta frase o sentencia ha llegado hasta nuestros días. Pero el hombre que ha sido capaz de modificar El Clima, y La propia Naturaleza, en muchos casos ha sido capaz de cambiar el sentido de las palabras Bíblicas y  ha aprendido a comerse el PAN con el sudor y el trabajo de los demás. 

Más adelante y para demostrar que el PAN se había convertido en alimento básico de los más humildes y sencillos, tenemos como ejemplo el pasaje de Los Panes y los Peces, donde la comida se hacía fundamentalmente a base de PAN.

Efectivamente este alimento el PAN, se constituyó en el alimento básico de las clases más humildes y trabajadoras. La elaboración del PAN posiblemente se originó en los medios rurales y del campesinado, y de allí pasó a las poblaciones en donde supieron producirlo no solo para el consumo propio sino para su venta como una forma más de intercambio y negocio.

Históricamente se estableció como una distinción social, el comer PAN de un color u de otro. El color de la miga del PAN, indicaba su categoría. Así el PAN de Centeno con su miga oscura, era propio de las clases más sencillas y desprotegidas, mientras el PAN de harina, con su miga blanca, denotaba categoría y suficiencia.

EL PAN DESDE ANTIGUO

En el 11 de septiembre de 1500, se firma en Granada y por los Reyes Católicos, una cédula por la que mandan que todos los que sacasen PAN por los puertos de Andalucía pagasen 200 maravedíes por el cahíz de trigo y 150 maravedíes por el de cebada. Libro "DIVERSOS DE CASTILLA" (972-1716), de PAZ y Julián, Catálogo I, Madrid 1969, pág. 126, nº 594.

Esta cédula demuestra que ya desde la antigüedad en España, el Pan siempre tuvo necesidad de ser "regulado y protegido", al considerarse un alimento básico. Y serían muchos los documentos que podríamos mostrar aquí, pero con uno creemos que basta. .


EL MOTIN DEL PAN (Mayo 1652)

El trigo como base para la elaboración del PAN, históricamente ha sido motivo de hambrunas y de revueltas por las subidas del mismo precio del pan. En el barrio de San Lorenzo, se produjo una revuelta que se le denominó EL MOTIN DEL PAN, y tuvo lugar en 1652. Todo fue debido al encarecimiento del precio del trigo y a la acumulación desmedida de los especuladores, que determinó su encarecimiento. Ante los gritos y arengas de una mujer del barrio que con su hijo en los brazos muerto de hambre,  reclamaba a voces la hombría necesaria para luchar contra las injusticias y los especuladores. Se enfrentaron claramente contra el Obispo don Pedro de Tapia (1649-1652), y todos los cargos públicos, a los que acusaron de "logreros y abusivos", en el tema de acaparar trigo y muy especialmente en contra del corregidor Vizconde de la Peña Parda, Pedro Alfonso de Flores y Montenegro, al que depusieron de su cargo y nombraron a don Diego de Córdoba,  

En esta revuelta debió significarse a favor de los amotinados un sencillo coadjutor de San Lorenzo, llamado Juan Palos, que además de ofrecer la Iglesia del barrio para sus asambleas, supo apaciguar pacientemente las revoltosas protestas de Juan Tocino y “El tío Arrancacepas”, que de alguna forma lideraban aquella revuelta..

Parece ser que el el Archivo de la Parroquia de San Lorenzo, existen documentos que pueden dar pie a creer que la actual calle Juan Palo, (antigua Calle del Guindo), se puso en homenaje al citado cura Juan Palos, que al morir se le quiso hacer homenaje a su sencillez y solidaridad demostrada en las cosas del barrio.

EL PAN EN ROMA

Mucho más antiguo y en la misma República de Roma se dieron también muchas revueltas y quejas de la población por situaciones parecidas. Efectivamente Roma que durante cincuenta años mantuvo una disputa a muerte con Cartago, fue nada más vencer Escipión el Africano a Aníbal, en la famosa batalla de Zama, (año 202 A.C), cuando se lanzó a extender su Imperio por la zona de Egipto y el Norte de África, y sus inversores de capital y especuladores, “Desubicaron”, sus producciones de trigo a estos últimos países conquistados, (cultivos más baratos), con lo que los Romanos (de la Roma Itálica), se quedaron sin trigo propio cultivado y barato. Con ello se sumió al pueblo en el hambre y la escasez de trigo.

Los que mandaban en la República de Roma, para solucionar este enorme problema, tuvieron que pensar en una especie de SERVICIO NACIONAL DEL TRIGO, llamado, ANONNA, por el que a cada ciudadano y vecino de Roma, se le garantizaba un "MODIO", equivalente a una módica cantidad de trigo a precio barato para que pudiera elaborar su PAN. Fue precisamente Pompeyo, el que luego sería derrotado por Julio Cesar, el último jefe de esta especie de súper organismo protector (ANONNA).

Los hermanos Graco, (Tiberio y Cayo), nietos de Escipión el Africano, quisieron acabar con esta situación de debacle en la economía y el abastecimiento del trigo, que se pudo llamar muy bien la primera “BURBUJA DEL TRIGO”, Pues los especuladores de siempre retenían el grano, e incluso al obtenerlo barato en los terrenos conquistados, lo quemaban y destruían muchas veces para encarecer su precio.

Estos hermanos intentaron obligar a los agricultores romanos a que plantaran sus campos de trigo para que el PAN llegara a todos los rincones de la Península Itálica.


EL PRIMER PAN

Era el año 1955 y estábamos de monaguillo en San Lorenzo, y el monaguillo habitual del Convento de Jesús Nazareno, se había colocado de aprendiz en el Metro S.A. de la Calle Barqueros, entonces Calle García Morato. y por mediación de la portera Rosario Vega Palma (1917-1980), me llamaron a mí para que ayudara a la Misa que todos los días y a la 8 de la mañana, decía don Pedro Varona Luque (1890-1975).que era el capellán del Convento Para mí aquello suponía en vez de ir para la Iglesia de San Lorenzo, acudir a la Capilla que tenía entonces el Hospital de Jesús Nazareno y que se entraba por la Calle Ocaña (donde hoy está el Gimnasio del Colegio). Recuerdo que aquella Capilla era pequeña (unas 8 bancas), pero luego se recorrían unas amplias cortinas y se comunicaba con una gran sala orientada hacia la derecha, en donde estaban los enfermos acogidos en el Hospital.

En el altar mayor de esta Capilla del Hospital estaba la imagen de Nuestra Señora la Virgen Nazarena, imagen de a partir de 1918, y con la llegada a la Hermandad del Calvario de D, Juan de Austria y Carrión (1867-1947), persona que gozó siempre de mucha confianza por parte de las monjas, logró que éstas, le facilitasen todos los años la imagen de la citada Virgen para acompañar en su desfile de Semana Santa a Jesús del Calvario, esta situación se repitió hasta el año 1939. Las monjas eran exigentes con esta cesión pues al día siguiente de la procesión la imagen de la Virgen tenía que estar de vuelta en el Convento.  Esta imagen en el desfile procesional salía bajo la advocación del Mayor Dolor que era la titular de la Hermandad..

Muy pocas veces, la citada Misa se celebraba en la Capilla particular de las monjas que se encontraba justo por encima de la Puerta actual del Garaje por donde hoy entran las furgonetas y mercancías para la Residencia, situada en Buen Suceso, esquina con la Calle Ocaña. Esta Capilla, aunque pequeña, me impresionó por su gran riqueza en atributos de plata.  Y ya, como más de tarde en tarde, la Misa se celebraba en la actual Iglesia de la Calle Jesús de Nazareno, en donde se veneraba la imagen de Jesús Nazareno.

Fuera la Misa en un sitio u otro, la joven y dinámica hermana "María Nazaret", se preocupaba todos los días de llevarme al "Patio de los Jazmines", patio que aún hoy subsiste parte de él, y allí sentado me ofrecía un desayuno a base de un tazón de café con leche y media telera de PAN con manteca; además y por instrucciones de la Madre Cristobalina, una peseta, que le venía muy bien a mi madre. Recuerdo que en aquellos tiempos la comunidad de monjas estaba compuesta por 25 madres o hermanas y 6 colegialas, y la monja de más edad tenía 47 años, posiblemente la madre superiora y que era de Posadas (Córdoba); las demás religiosas estaban en torno a los 25-32 años. Hay que tener en cuenta que este Convento era la Casa principal de la Orden de Jesús Nazareno, que fundara el padre Cristóbal de Santa Catalina. (1638-1690).

Siempre recordaré a aquella hermana "María Nazaret", que era todo un dechado de amor al prójimo, la vida la sometió a una dura prueba pues desde muy joven, tuvo que soportar un padecimiento de tipo neurológico, lo que hizo que su vida en el Convento pasara a un segundo plano dedicada a labores poco menos que de portera y telefonista. Debió morir alrededor del   2013, y siempre recordaré el cariño y la dulzura que mostraba, cuando me facilitaba aquél "PAN CON MANTECA", que me ponía todos los días.  

Igualmente recuerdo a la "Quica" a la "Berta" y a la tal "Gertrudis", aquellas mujeres residentes en el Hospital y claramente disminuidas psíquicas, que eran las encargadas de vender por las Calles próximas del Barrio, aquellos ramos de jazmines que se recogían de forma bondadosa de aquél maravilloso patio. Hay que recordar que el ramo de jazmines costaba 0.25 céntimos de peseta. Era curioso que ellas siempre solían pasar un poco después que lo hiciera la mujer que de nombre Adela González, y en la hora de la "siesta" solía recorrer las Calles del Barrio vendiendo sus "caracoles guisados". Esta mujer de cuerpo "bajito" portaba una olla en cada mano, y partiendo de las Costanillas, recorría las Calles del Barrio, en una mano llevaba la olla de los "caracoles guisados" y en la otra el "caldo". Los nenes al oír la voz de esta mujer de "caracoles guisados", solíamos contestar "muertos y espachurrados". No cabe duda de que esta mujer con su venta callejera, fue una adelantada de lo que es hoy el "negocio" de los puestos de caracoles en Córdoba.

En cuando a la riqueza en atributos sagrados de plata que observamos en la Capilla de las monjas, sería don Dionisio Ortiz Juárez (1913-1986), el que al estar haciendo el Inventario de Orfebrería de San Lorenzo nos comentaría: "El Convento de Jesús Nazareno, es de los que más plata poseen de Córdoba". Al parecer gran cantidad de esa plata se empleó en la gran remodelación que se llevó a cabo en el recinto del Convento para adaptarlo a Residencia de personas mayores y Colegio.  Curiosamente en el año 1972, y hojeando los archivos, nos tropezamos en el LIBRO Nº 2, de defunciones "LA PARTIDA" (24 de julio 1690), de defunción del Padre Cristóbal de Santa Catalina, el fundador del Convento y que en la mayoría de sus representaciones iconográficas realizadas por los artistas Ayala y Bernal, aparece con una talega costal al hombro en actitud de repartir Pan a los pobres


EL PAN DE LOS POBRES

Recordando a Baldomero Cortés Bodoque (1933-2003), aquél gran profesional con el que tuve la suerte de tropezarme en los últimos años de su vida profesional en Westinghouse. Las circunstancias y las vueltas que da vida, me dieron la oportunidad de tenerle como subordinado mío, y la verdad es que siempre recordaré aquella oportunidad que tuve de aprender tanto de él..

Por aquellos años de 1980, en fábrica José Molina Tenor (1921-2016), estaba de dependiente en el Economato de Fábrica antes que los suecos de ABB, lo eliminaran como tantas cosas. Un día en que se estaban haciendo allí unas reparaciones en la conducción del agua que afectaban al sótano, surgió la conversación sobre la obra poética "ELEGIAS DE SANDUA" de su hermano el poeta Ricardo Molina Tenor (1917-1958), e inevitablemente salió a colación todos los parajes que lindaban con la Finca el BAÑUELO, como "LA AGUARDENTERA", "EL SOLDADO", y como no, el ARROYO EL BEJARANO, cerca de donde, el amigo Baldomero había comprado una pequeña parcela, bastante cercana a la  Eremitorio del padre Cristóbal de Santa Catalina, ese sencillo personaje que con su TALEGA COSTAL al hombro aparecía en actitud permanente de entregar PAN a los pobres. Y siempre recordaré aquellas palabras de Baldomero Cortés, cuando nos dijo: "Todo el que es capaz de dar Pan a los que lo necesitan tiene que ser muy buena persona". 

Recuerdo que él, un hombre alejado de las cosas de Iglesia, se interesó por este personaje en actitud de dar Pan, como él decía, y el mismo José Molina, le comentó el mosaico que se hallaba en el antiguo Eremitorio, en el que aparece San Diego de Alcalá, San Francisco de Asís, y en el centro la Virgen de Villaviciosa, de ahí la costumbre que tiene esta Hermandad de Villaviciosa, de entregar Pan a los necesitados en sus fiestas y celebraciones.


LA HERMANDAD DE LOS PANADEROS

A la Hermandad del Calvario de San Lorenzo se le nombra como la Hermandad de los Panaderos, y la verdad es que no existe ningún documento en sus estatutos, que acredite esa relación. El mismo Juan Aranda Doncel (1948), un estudioso de estos temas si justifica de alguna forma que el gremio de los panaderos estuvo unido a la Hermandad de Jesús de la Sangre de San Nicolás de la Villa. Nada dice al respecto de la Hermandad del Calvario.

Pero por encima de documentos y papeles, hay que tener en cuenta que en los años de fundación de la Hermandad del Calvario 1722, y posteriores fechas del siglo XIX, en las profesiones de los vecinos del Barrio de San Lorenzo, destaca la ocupación de "Panadero", al igual que la de "Zapatero", así tenemos que en 1869, existen 970 jornaleros, 164 panaderos, y en cifras menores los albañiles y otras profesiones. También sería significativo la concurrencia y proximidad en el Barrio de cinco o seis hornos de pan. 

Francisco Quiles Rojas (1893-1957), vecino de la Calle Juan Palo y posteriormente de la Calle Roelas, jornalero del campo, era para los chavales de aquella época, una persona entrañable y muy cercana, que disfrutábamos con las habilidades que tenía de "amaestrar" a sus gorriones, y también de su agradable y espontanea conversación cuando nos hablaba. Sobre todo, en aquellas tardes-noches de verano en las que se tomaba el fresco en la puerta de la casa, nos contaría que él asistió como "testigo" a ese juicio del "CRIMEN DE ARMENTA" que se hizo famoso en San Lorenzo en el 1924. Y es que él fue cliente asiduo de la citada Taberna de Armenta, y que conoció y trató a don Juan de Austria y Carrión, y nos había comentado de él:  "Este "señorito" que vivía en la Calle Fernando Colon, era un gran hombre, y tuvo una gran relación afectiva con el Barrio de San Lorenzo, y se puede decir que su "despacho de abogado" estaba de forma ambulante en la "Taberna de Casa Armenta" que por otra parte, era como el centro principal del Barrio. Nos comentó de él, que una persona dinámica y que marcó una época de iniciativas en San Lorenzo. Se preocupó siendo Hermano Mayor del Calvario, de "Levantar la Hermandad", por todo lo alto; incluso se atrevió a "Picar" la Capilla del Cristo para que se pudiera ver la piedra, siendo un en 1925, un adelantado, de lo que luego haría en 1956, el recién llegado cura Novo, que llegó a descubrir toda la piedra de la Iglesia. Este hombre organizó  muchos eventos festivos en el Barrio, como Verbenas, Cucañas, Tómbolas, Concursos de Belleza, y hasta llegó a organizar varias veces una especie de jornadas de Pan "PARA TODOS", Esto se llevó a cabo en los años 1918-20, en que las distintas huelgas y actitudes de protesta de los trabajadores del campo, trajo inevitablemente, hambre e incertidumbre entre las clases más populares de los jornaleros del campo, jornaleros, que éramos la mayoría de los trabajadores y hombres en edad de trabajar, nos diría él. Los conflictos laborales siguieron su curso natural y una forma de atenuar el hambre, eran estas acciones de tipo solidario en la que colaboraron los hornos del Barrio y sus proximidades. Fue un grupo de voluntarios dirigidos por él, los que recolectaron y obtuvieron unos ciento cuarenta panes de a kilo, panes, que debidamente cuarteados se le iba entregando a los que lo solicitaban. Este simpático acontecimiento de la entrega del Pan, tuvo lugar en el patio de la Taberna regentada por Pepe Arjona Zamorano que era como una "sucursal" de Casa Armenta, y que estaba ubicada en la acera de enfrente, de la propia Casa Armenta. La cola de personas para recoger el Pan, entraban por la puerta de la Plaza de San Lorenzo y salían por la del Arroyo de San Lorenzo. En esta operación del "Pan solidario", intervinieron gustosamente, Pepe y María Arjona Diez, abuelo y madre de Pepe Bojollo, el eterno sacristán de San Lorenzo." que eran los mozos de la Taberna.

Los relatos de Francisco Quiles, así como los mi madre, me llegó a interesar en el tema del CRIMEN DE ARMENTA, y por la prensa de la época, hemos llegado a saber, que don Juan de Austria y Carrión, fue la persona que como abogado organizó la defensa de la joven acusada, Carmen Bejarano Meléndez (1902-2003), logrando que el supuesto crimen fuese sobreseído. La mayoría de los testigos que declararon en una abarrotada Audiencia Provincial, estuvieron de acuerdo de que el fallecido Rafael Armenta Álvarez (1897-1924), fue ya un caso continuado de maltrato y abuso machista. La mayoría de los testigos fueron personas clientes de la Taberna de Armenta, que era propiedad del fallecido. Aparte el certificado médico emitido por el doctor Luarco y respaldado por los peritos señores Romera y Roncal, todos ellos llegaron a la conclusión final, de que las heridas producidas por las tijeras en el vientre de la víctima no fueron la causa de su muerte.

Al final de este juicio y aunque la procesada estuvo detenida mientras se instruía el expediente, finalmente fue declarada NO CULPABLE, al retirar el Fiscal las acusaciones, por lo que fue sobreseído el caso. 

EL PAN EN LA UNIVERSIDAD LABORAL

Para muchos de nosotros la Universidades Laborales significaron un avance importante en nuestras vidas, pues aparte de la formación profesional y humana que se nos pudo dar, fue una forma ordenada en cuanto a la alimentación se refiere. Allí encontramos un horario, encontramos un menú variado y de calidad, hasta el punto de que para muchos de nosotros nos garantizara un desarrollo adecuado. Puedo decir que entré midiendo 1,54 en 1957, y cuando salí medía 1.81, sin duda las "habichuelas a la vinagreta" que nos servía la agradable Casilda Serrano Medina (1926-2010), nos sentaría muy bien. Pero lo que estaba bueno y con ganas era el excelente PAN, que se elaboraba en aquellas modernas instalaciones en donde Enrique Nieto Segura, Francisco Flores Sánchez, y demás profesionales de la panadería se esforzaban por tenerlo preparado y totalmente a punto para la hora del desayuno, el almuerzo, la merienda y la cena. Eran 4 bollos de pan totalmente del día (no como en los cuarteles), y con un sabor exquisito. Todavía recordamos aquella merienda con tu bollo de PAN y el buen trozo de carne de membrillo San Lorenzo, de Puente Genil, que era todo un lujo en aquellos tiempos.

PAN Y CONEJO

Simpático nombre antiguo de una Calle de Córdoba; y que  actualmente se llama "LA PIERNA" ubicada en la zona céntrica de la Calle Barroso. No se sabe a ciencia cierta a que obedece el nombre de esta Calle, pero en 1497, ya aparece con este nombre, y en 1827, aparece un tal don Pablo Valle García como panadero. Posiblemente se deba este apodo, a que hubiera por allí algún Mesón o Posada, que pusiera al servicio de sus clientes, algo parecido a lo que el popular "Rafaelito" solía poner en su Taberna del "OCHENTA Y NUEVE" del Realejo allá por el año 1940-1955, en donde hasta su desaparición en el año 1978, estuvo en un rincón de la izquierda los precios de: "MUSLO DE CONEJO a 0.60 pesetas", "CENTRO DE CONEJO a 0.70 pesetas y "CABEZA DE CONEJO a 0.40 pesetas". 

Y probamos la existencia de esa Calle de Pan y Conejo, con la reseña de este documento que encontramos en el Archivo de la Catedral:

"1497, diciembre. 28. Córdoba,

"Carta de venta de una casa en la colación de San Juan, en la calleja de Pan y Conejo, otorgada por García Ruiz de To­ro en favor de Juana de Morales, hija de Juan Rodríguez de Mo­rales, vecina de Córdoba. En Córdoba 28 diciembre 1497, ante Pe­dro Ortiz, escribano público.

Pergamino. 4 pág. 280 mm. x 210 mm. Dañado por la humedad en el margen superior y primeras líneas del texto"..

MARCELINO PAN Y VINO

Fue una película cuyo título enarbola la importancia que tenía el "PAN" incluso en la ingenuidad de los niños de aquella época. y que hábilmente "relató" en su historia, que fue estrenada en 1954. Como el retrato lógico de aquellas épocas, la película se estrenaría en Córdoba en el "PALACIO DEL CINE"  en marzo de 1955. Y a pesar de que en las carteleras estaban películas de categoría como: "EL CUARTO HOMBRE", "FORT BRAVO", "CANTANDO BAJO LA LLUVIA" "LA GUERRA DE LOS MUNDOS", "PAN AMOR Y FANTASIA", "INFIERNO BAJO CERO", "JULIO CESAR", "LA TUNICA SAGRADA", "CAÑAS Y BARRO", "QUO VADIS", "RIO SIN RETORNO", "DEMETRIO Y LOS GLADIADORES", "MUERTE DE UN CICLISTA", etc. etc., películas importantes en la historia del cine, pero esta película de Marcelino Pan y Vino, rompió moldes en recaudación y popularidad, siendo posiblemente una de las películas más vistas de la historia en España. El simpático zapatero de la Calle Montero, Germán Ruiz, fue testigo de aquél estreno pues sus padres eran los conserjes del "PALACIO DEL CINE" y allí le pilló toda la historia..

El protagonista principal de la película fue el niño Pablo Calvo Hidalgo (1949-2000), al que se renombró como Pablito Calvo. Fue soldado de aviación y posteriormente hizo una licenciatura técnica. Fue seleccionado para hacer esta película entre miles de niños. El director Ladislao Vadja Weiszet (1906-1965), diría que la dulzura de su rostro de niño, fue lo que lo que determinó su elección.

El autor del guión de la película fue José María Sánchez Silva y García-Morales (1911-2002), que aunque hijo de un posible anarquista que tuvo que exiliarse en 1939, se puede decir que todo lo que escribió fue favorable y del agrado de Franco, y después de pasar hasta por un centro de huérfanos en Madrid; con este guión consiguió premios nacionales e internacionales, por lo que fue un autor muy leído. Su éxito rotundo le llegaría con la película "MARCELINO PAN Y VINO" que llegó a convertirse en la película de la que más se ha escrito y la más taquillera de todos los tiempos, con record de recaudación en España, Italia y Japón. En Italia y concretamente en Roma llegó a estar 6 meses en cartel. Premio del público de Berlín; y en el festival de Cannes, llegó a tener un aplauso de ocho minutos de duración. Un periódico japonés  llegó a decir: Con película como esta, se arreglaría la sociedad en poco tiempo"  

Se editaron colecciones de cromos que todos los padres se preocuparon de coleccionar para sus hijos. Igualmente ocurrió con cuentos y relatos. Los domingos por la tarde y en el Gran Teatro y el Duque de Rivas, al igual que los TBOS, se cambiaban las estampas.

La ambientación del Convento se rodó en la ermita del CRISTO DEL CALOCO, en el Espinar de Segovia. No obstante la figura del "Cristo del desván", fue un dibujo de Antonio Simont Guillén, y un amigo suyo lo moldeó en escayola.  Al terminar la película se hizo limpieza en los Estudios Chamartín, y el "Cristo del desván" lo enviaron al Convento de Carmelitas en Don Benito (Badajoz), en donde una monja la hermana sor Isabel de Jesús López Cabrera, lo reclamó como simpática gratificación por haber facilitado ellas "EL PAN" que aparece en la película y que adquirió un gran protagonismo. El Cristo preside la Capilla de Santa Teresa.

EL PALILLO DE PAN Y EL DESPEGUE

Fue al final de los años 50 y principios de los 60 cuando “LOS PALILLOS”, tuvieron una enorme demanda, pues dio la impresión de que todo el mundo, familia incluidas, se echó a la terrazas de los Bares a consumir tapas. Quizás no sea políticamente correcto, pero hubo una realidad y es que la subida del salario mínimo a 1800 pesetas, fue como el pistoletazo de salida de la gente, que se embarcó en un tren de confianza y consumo que se dejó notar en todos los estamentos de Córdoba y muy especialmente en las terrazas de los Bares. De la clásica tapa, se pasó a las raciones e incluso a  pollos enteros, y había que haber visto aquel Sector Sur, lleno de bares por todos sitios y consumiendo toda clase de comidas.

Bares o Tabernas como el "OCHENTA Y NUEVE" con sus tapas de conejo, o calamares fritos, y las gambas rebozadas, fueron un poco la avanzadilla, que luego significó EL BAR SAN CAYETANO, EL BAR JARDIN, EL BAR LOS MOCHUELOS, EL BAR SENECA, CASA MIGUELITO, LA HOSTERIA y que terminaría con el BAR LITRI, en donde se ponían a pollo por cabeza; además de toda clase de raciones y platos para comer. Ya en el tema de los pollos y los conejos, el Bar "EL FRENAZO", camino del MURIANO, Bar "CASA PELITOS", y "LA ALEGRIA DE LA SIERRA", fueron los pioneros en Córdoba en este plato.

Efectivamente ante esta demanda del “mercado”, el tema del "PALILLO DE PAN" se industrializó, y de ello pudo dar buena fe, Francisco Medina Córdoba, (1943-2010), el simpático “Cojo” de San Lorenzo, que fue sin lugar a dudas una de la personas que más palillos pudo envolver en Córdoba. Poco antes de su fallecimiento, no lo encontramos en su cabina de la ONCE, junto al Bar BOLONDRO, y hablando de los palillos de PAN, nos llegó a decir: "Yo habré liado cerca de CUARENTA MILLONES DE PALILLOS, en los diez años que colaboré en el Horno de San Lorenzo.


EL "DURO· Y LA MISA

A raíz de la idea de este empresario del sector, ya empezaron otros panaderos, a fabricar y liar “PALILLOS DE PAN”, destacándose en este menester el "HORNO DE SANTA ELVIRA" de la Calle Abejar, que fue el primer horno que empezó a envolver los palillos.. El palillo a nivel individual te costaba una “gorda” 10 céntimos de peseta. No queremos dejar de citar aquí a la dueña del Horno de "SANTA ELVIRA", porque esta buena mujer, doña Elvira Fernández Bermejo (1900-1993), natural de Oropesa (Toledo), le celebraba todos los años en la Iglesia de San Lorenzo, una Misa de aniversario a su esposo Rafael Rodríguez Muñoz, (1897-1939), que falleció en noviembre de 1939. Después de la celebración de la Misa de Aniversario, esta bondadosa mujer, le entregaba "UN DURO", a todos los que lo aceptaran y hubieran escuchado la Misa por su marido. No hace falta decir que en aquellos años 1950-1960, al tratarse de un barrio popular, la gente acudía a aquella Misa de 8 de la mañana para recoger el "DURO". que la buena de Doña Elvira entregaba.